Nunca he
hablado por aquí del suelo pélvico tras el parto, digamos que es uno de “los
olvidados”, en cuanto a que, le damos más prioridad en el post parto a otras
cosas, como, que el bebe se enganche al pecho, los gases, las cacas, el poder
dormir y nos olvidamos de cómo hay que cuidar y restablecer el suelo pélvico
tras el parto.
Hasta que unos meses después, cuando la zona cero ya se ha curado y parece normal, nos damos cuenta de que ese musculo desconocido ya no esta tan fuerte como lo estaba, y la realidad es que tiene sentido ha estado aguantando todo el peso de nuestro bebe, liquido, placenta y demás kilos que nos hemos ido agenciando durante el embarazo sin darnos cuenta.
Por eso yo
siempre he tenido curiosidad de cómo cuidar el suelo pélvico conscientemente, y
no solo con los ejercicios de kegel sino también siendo conscientes de cuáles
son los músculos que sujetan todo y que función tienen. Por eso estuve en un
centro que se llama Aupale


La verdad es
que no puede salir más concienciada de la importancia del cuidado del suelo
pélvico y de lo difícil que me resultó y lo eficaces que pueden llegar a ser
los abdominales hipopresivos bien hechos.
Así que
dejando a la pequeña princesa con su padre, allí que me fui una mañana entera a
un intensivo de suelo pélvico e hipopresivos. Los cursos los imparte una
fisioterapeuta experta en hipopresivos y en salud de la mujer, Maria, muy maja
y paciente con nosotras.
Éramos un
grupo de seis mujeres y la verdad es que me di cuenta de que realmente el suelo
pélvico hay que cuidarlo SIEMPRE, no en el post parto o en el embarazo, allí
había mujeres que aparte de haber sido madres, más o menos recientemente
comentaban que siempre habían tenido pequeñas pérdidas de orina o al reír o al
hacer algún deporte de impacto, estornudar, subir o bajar escaleras y que al
ser madres este problema se había agravado.
María, http://concienciamujer.es/la
fisioterapeuta que nos impartió el curso, nos dio algunos tips o consejos para
cuidar nuestro suelo pélvico, estuvimos hablando de la postura, que al iniciar
la jornada laboral, en mi caso en frente del ordenador es bastante correcta y
al cabo de unas horas, termino escurrida en la silla dejando caer todo el peso
de mi cuerpo en las lumbares y eso no es lo correcto, esto también afecta la presión que soporta el suelo pélvico todo
el día.
Otra de las
cosas súper importantes es no aguantar el pis, y tampoco hacer lo de
cortar el chorro mientras hacemos pis, porque lo que hacemos es que no dejamos
que la vejiga se vacié completamente, hay que dejar que el chorro salga por sí
mismo, al igual que al hacer “cosas mayores”, el estreñimiento es un enemigo
importantísimo para el buen estado del suelo pélvico, ya que al intentar que las
heces salgas estamos empujando y ejerciendo presión hacia abajo en nuestro
suelo pélvico y esto no nos interesa.
A parte de
otras indicaciones de salud , como beber agua y tener una alimentación lo más
equilibrada posible va ligado a las dos cosas anteriores que ya os he
mencionado.
También es
verdad y ya os he hablado que después de dar a luz y tras la recuperación de “la
zona cero” hay que realizarse una revisión en nuestra matrona, y es importante
porque ella nos va dar luz verde para realizar todo tipo de ejercicios o en el
caso de que tengáis pérdidas de orina, o notéis sensaciones de bulto en la
vagina, molestias a la hora de mantener relaciones sexuales debéis acudir a
vuestro ginecólogo o matrona.
Después de
estar hablando de todos estos temas, pasamos a reconocer en nuestro cuerpo,
tumbadas en el suelo, rodillas flexionadas, plantas de los pies en el suelo y comenzamos
a realizar
ejercicios “por partes”, es decir entrenando la musculatura superficial (el
“triángulo” anterior), la profunda (el “triángulo” posterior) o todo a la vez
(el “rombo” perineal), es súper importante que localicemos los músculos
que queremos mover, es cuestión de imaginar la zona, e intentar visualizar como
lo movemos, esto requiere concentración y estar relajadas y lo conseguiremos. También
podéis realizarlo en distintas posturas y aumentar o disminuir el tiempo para
cambiar el nivel de dificultad.
Los
ejercicios de Kegel consisten en activar, mantener y relajar, se puede empezar
por contraer y relajar, unos segundo contraigo y los mismos segundos relajo,
cada una lo que pueda. También se pueden hacer rápido contando hasta 10 rápidamente
y luego relajar al final.
A continuación
empezamos hacer los famosos abdominales hipopresivos, bien, ahora viene cuando
yo flipe en colores cuando la fisioterapeuta que nos estaba dando el curso
intensivo, Maria, hace un hipopresivo y esta muchacha, se mete pare dentro! Total! Mi
cara es de¡ cómo!! Y yo tengo que hacer eso!! Por dios! Que difícil!
Pues sí, a mí
me parecieron súper difíciles y es que podéis ver por youtube mucho s videos de
gente metiendo y sacando la tripa, pero cuidado! No consiste en eso, hay que
ser conscientes de lo que hacemos y de cómo lo hacemos, inspirando, expirando,
manteniendo la apnea unos segundos y controlando la postura, y todo eso a la
vez.
Si bien es
cierto que pasados unos días practicando me resultan más fáciles y con 5
minutos al día empezando es más que suficiente. Os voy a poner por aquí algunas
fotos de ejercicios que fuimos haciendo.
Como conclusión
del taller, pues deciros que revisar y ejercitar el suelo pélvico es mucho más importante
de lo que parece y que sacar 5 minutillos al día para empezar, y realizar tres o cuatros posturas con un par
de apneas por posturas es más que suficiente y que realmente no cuesta tanto y
son tantos beneficios los que se obtienen que realmente merece la pena.
Y vosotras
como habéis recuperado vuestro suelo pélvico después del parto? Conocéis los abdominales hipopresivos?
Le dais la suficiente importancia al suelo pélvico? Contadme vuestras
experiencias.